¿Puede destruirte el amor?

Quizás este título pueda sonar algo extraño ya que no es común asociar un sentimiento tan bello y sublime como es el amor con algo tan dañino y devastador como es la destrucción, pero el amor a la vez de construir, también puede destruir  ¿Cómo? Examinemos.

Muchos de nosotros podemos tener una vida de muchos logros y éxitos, podemos tener un gran talento para marcar la diferencia en el mundo. Podemos ser activistas sociales, o contar con una gran popularidad e influencia para combatir la injusticia y contribuir a un mundo mejor para todos. Sin embargo, muchas personas, a pesar de tener una serie de virtudes personales y maravillosos dones, a medida pierden la perspectiva y se pierden a sí mismos, cuando caen en amores frenéticos y obsesivos. 

Los amores obsesivos, terminan generando que una vez que aparecen en la vida de la otra persona, empiece a convertirse en su mundo. Ese amor todo lo abarca, ese amor se apodera de su vida. No vemos más que ese amor frenético por todos lados, por todas partes y a todas horas. A partir que esa persona aparece, todo lo demás deja de tener importancia 

Muchos de nosotros somos extremadamente talentosos. Nuestro talento puede crear una gran diferencia para el mundo. Podemos ayudar al mundo a luchar contra la pobreza, la injusticia y producir una vida mejor para todos. Pero algunos de nosotros caemos en el amor frenético. Este amor todo lo abarca. 

Este amor se apodera de nuestras vidas. No vemos nada más que nuestro amor en todas partes. Para nosotros, todos los demás trabajos se vuelven insignificantes, las demás personas, amigos, familiares, todo nuestro círculo social. Perdemos nuestro enfoque y nos centramos en nuestro amor de forma obsesiva, transformando toda nuestra personalidad.

Para una persona con este tipo de amor profundo y fanático, nada importa más que el amor. Todos los otros talentos e intereses personales pasan a segundo plano y lo único que interesa es ese amor. Sin embargo, este amor tan profundo y fanático cada día va destruyendo la esencia de la persona enamorada, que deja de ser totalmente quien es para intentar consagrarse a la otra persona. 

A fin no formes parte de esa destrucción, debes siempre mantener un enfoque nivelado hacia todo. Debes sentarte y reflexionar, pensando en cuanto afecta ese amor obsesivo a tu forma de ser. 

¿Ese amor te consume e influye en tus actividades cotidianas?, ¿has roto compromisos o dejado responsabilidades del lado?, ¿has mentido por ese amor?, ¿dejas de ser quien eres por esa persona?.  Averigua si te faltan objetivos más grandes y discute esto con la persona amada. Quien te ama, quiere que crezcas. Así que discute eso. Piensa, reflexiona y convierte otros objetivos igualmente importantes una vez más en la vida.

Enamórate, disfruta de la felicidad del amor, pero que ese amor no destruya tu personalidad.